Productos sin gluten para hostelería
Productos sin gluten para hostelería al por mayor. En Makro incorporamos continuamente productos sin gluten Horeca adaptados a las tendencias y necesidades de la restauración profesional. Anticipamos las demandas del canal Horeca con proveedores de alimentos sin gluten que cumplen altos estándares de calidad. Tras el éxito de nuestras gamas veganas y ecológicas, ampliamos nuestra oferta con productos sin gluten al por mayor para panaderías, restaurantes y caterings. Descubre una amplia selección de productos sin gluten para restaurantes y negocios profesionales, con garantía de seguridad alimentaria y formatos pensados para cocina profesional. Pregunta por nuestro pan celíaco, pastas, cerveza sin gluten, embutidos y preparados adecuados para el consumo de personas celíacas o intolerantes al gluten.

Amplia gama de productos sin gluten para negocios profesionales
Harinas, pastas, pan, bases para pizzas, salsas o embutidos son productos de uso habitual en la cocina y que habitualmente contienen gluten. Desde Makro hemos lanzado una línea especial gluten free para que las personas celíacas, sensibles al gluten o alérgicas al trigo puedan consumir este tipo de alimentos con total seguridad. Incorpóralos a tu negocio y logra una cocina más inclusiva.
Harinas y mezclas sin gluten para panadería y repostería
Conoce más sobre postres y dulces sin glutenOtros productos sin gluten para tu establecimiento
Proveedores y mayoristas de productos sin gluten
Conoce más sobre menús y recetas sin glutenPastas sin gluten
Salsas sin gluten
Pizzas sin gluten
Embutidos sin gluten
Cervezas sin gluten
Elaborados y precocinados sin gluten
Beneficios y propiedades de los productos sin gluten
Muchos más productos sin gluten te esperan en Makro
Preguntas frecuentes sobre productos sin gluten en Makro
El gluten es una proteína presente en cereales como el trigo, la cebada o el centeno. En el canal Horeca, evitarlo es esencial para ofrecer productos sin gluten para restaurantes aptos para personas con celiaquía o sensibilidad al gluten.
Los alimentos sin gluten excluyen cualquier producto elaborado con trigo, cebada, centeno o avena convencional. En su lugar, se utilizan harinas como la de arroz, maíz o quinoa, disponibles a través de proveedores sin gluten.
La FACE avala con la inclusión de un logotipo de restauración que un restaurante ofrece menús sin gluten. Si no encuentras esta información visible, consulta la carta que deberá incluir información sobre los alérgenos de todos los alimentos (símbolo trigo tachado) o pregunta directamente al personal de sala. Seguramente muchos de los platos del menú no contienen gluten (ensaladas, pescados y carnes a la plancha, ñoquis de patata, tortillas naturales, postres naturales, frutas, etc) pero es importante prestar atención a la forma de elaboración.
Como establecimiento, deberás ofrecer información cuidadosa a tus clientes y formar a tu personal para asesorar y responder a las inquietudes de tus clientes. En Makro contamos con un etiquetado riguroso para ayudar al hostelero en su día a día. Recuerda que en la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN) también encontrarás información de utilidad sobre la normativa y etiquetado de los productos alimenticios.
No deben. Según el Reglamento 828/2014, un producto sin gluten puede tener menos de 20 ppm de esta proteína. En Makro trabajamos con proveedores sin gluten que cumplen esta normativa. Es importante tener en cuenta que las menciones específicas sobre “sin gluten” o “muy bajo en gluten” son voluntarias; es decir: incluir esta información en el etiquetado de un alimento es algo que el productor/comercializador hace de forma no obligatoria.
¿Por qué, entonces, existen productos en los que consta “puede contener trazas de gluten”? Porque a la hora de informar sobre los ingredientes de un producto hay diferentes opciones, en lo que al gluten se refiere:
- Sin gluten (libre de gluten, gluten free) o etiquetados como “no contienen trazas de gluten”: productos que contienen menos de 20 ppm (partículas por millón) de gluten. Esto significa que son aptos para personas celíacas y que no hay peligro de contaminación cruzada ni trazas.
- Elaborado con ingredientes sin gluten: significa que los ingredientes usados para hacer el producto no tienen gluten, pero pudo haber contaminación cruzada.
- Bajo en gluten o muy bajo en gluten: el alimento puede contener entre 20 y 100 ppm, lo que supone que no es apto para personas celíacas.
- Puede contener trazas, contiene trazas o elaborado en una fábrica que utiliza gluten: el fabricante está indicado que alguno de los alérgenos podría estar en el producto de forma no intencionada.
Puedes optar por harinas sin gluten como las de arroz, garbanzo, maíz, quinoa, castaña, lenteja verde, tapioca, chía… A la hora de cambiar una harina por otra hay que tener en cuenta las características de cada una —ya que puede variar su proporción en la receta— así como el uso que le vayamos a dar.
- Fritos y rebozados: podemos optar por la harina de arroz o la de garbanzo (o una mezcla de ambas).
- Tempura: los posibles sustitutos son la de arroz, maíz o tapioca, teniendo en cuenta que se necesitará un poco más de agua respecto a la receta con trigo.
- Salsas: la harina de lenteja verde, con un sabor dulce a frutos secos, o la tapioca, con gran elasticidad, son dos opciones.
- Pan: es uno de los productos donde, a priori, puede ser más complicado sustituir el trigo ya que el gluten contribuye, en gran medida, a su esponjosidad y textura. Para lograrlo está la harina de maíz, trigo sarraceno, quinoa, castaña, tapioca, chía, lino… Eso sí, es importante tener en cuenta que hay que añadir un 25 % más de agua y, en algunos casos, incorporar algún espesante.
- Postres: el sustituto dependerá de la textura y consistencia que se requiera. ¿Posibilidades? Harina de arroz, avena, quinoa o lenteja verde.
Una dieta sin gluten no tiene porque suponer riesgo para la salud siempre que se siga un régimen equilibrado; el problema está en que no siempre es fácil reemplazar un alimento por su versión sin gluten. Además, en el caso de los dulces/postres, los sustitutos suelen llevar más grasa y azúcar.
Por eso, para aquellas personas que deban seguir una dieta sin gluten se recomienda:
- Aporte de fibra: a través de cereales sin gluten (como el arroz integral, la quinoa o el mijo), frutas, verduras, legumbres, frutos secos, semillas, etc.
- Vitaminas del grupo B: presentes en las verduras de hoja verde, la soja, las semillas de girasol, el hígado, los frutos secos, el puerro, la remolacha, los cítricos, los aguacates, las lentejas, los guisantes, etc.
- Hierro: consumiendo legumbres, huevos, mariscos como las almejas, mejillones o berberechos, hígado, pistachos, almendras, avellanas, espinacas, etc.
Asimismo es importante priorizar alimentos naturales frente a los procesados para, además de garantizar que no estamos consumiendo gluten, aportar a nuestro cuerpo los nutrientes que necesita.